Esta mañana llegó imbuida por el aroma de ese incienso que tanto me gusta y que hace tiempo que no quemo. Todo estaba bien. Narciso y Goldmundo paseaban por mi cabeza. Otro tiempo fue posible y yo estuve allí. Se sufría "la peste" y la gente moría en cantidades generosas, pero también existían los claustros silenciosos, la alquimia y la comunión con la naturaleza... con Dios, a fin de cuentas.
Luego ha ido volviendo todo: el teléfono, el ordenador, el aire acondicionado que me está dejando amojamado, el fútbol, las carpetas, Ebay, guitarras y guitarristas...
Y otra vez metido en la vorágine.
Mi amiguete Pulpek diría: "Siempre con lo puto mismo"
Luego ha ido volviendo todo: el teléfono, el ordenador, el aire acondicionado que me está dejando amojamado, el fútbol, las carpetas, Ebay, guitarras y guitarristas...
Y otra vez metido en la vorágine.
Mi amiguete Pulpek diría: "Siempre con lo puto mismo"
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